Puesto que correr es uno de los deportes más de moda, he pensado que era un buen momento para hablar del calzado. Es uno de los detalles que más tienes que tomar en cuenta, para tu comodidad, pero también por seguridad y para evitar las lesiones. Por eso, en este artículo te voy a explicar como elegir tus zapatillas de running, pero no voy a recomendarte ningún modelo en concreto. Eso ya lo decides tú la próxima vez que vayas de compra. El calzado es más que un accesorio, es un elemento imprescindible.
Lo cierto es que hoy en día hay casi demasiadas opciones para elegir. Entre tantos modelos y tantas marcas, puede ser un poco complicado saber qué zapatillas para correr serán las mejor adaptadas a tu caso.
No existe el modelo de zapatillas de running perfecto
Como veremos a continuación, la elección de un calzado cómodo y adaptado depende fundamentalmente de la forma de tus pies, tu morfología, tu pisada, tu nivel y del tipo de terreno en los que corres. Pero los dos criterios más importantes son los tres primeros. Y como todos tenemos pies diferentes y pisadas distintas, lógicamente no va a existir un modelo de zapatillas de running perfecto para todos.
La tecnología ha evolucionado mucho, y tienes productos de calidad en diversos rangos de precios. No hay realmente marcas buenas o malas, solamente modelos que se adaptan a tu pie y a tu pisada, y otros que no sientes tan cómodos.
Así que cuando hayas encontrado el modelo que te conviene, apúntatelo, y vuelve a buscar el mismo cuando hayas gastado tu par de zapatillas. O simplemente aprovecha y compra más de un par si ya sabes que les vas a dar un uso muy extensivo. Además, los corredores habituales, aquellos que salen más de tres veces a la semana, procuran no usar siempre el mismo par. Para darle descanso y tiempo para secar correctamente, principalmente.
Pero vayamos al tema.
Elegir un par de zapatillas de running que te vayan como un guante
Nada más calzar tus nuevas zapatillas, tienes que sentir una comodidad absoluta. Eso es lo más importante. Si notas cualquier molestia, que te aprietan por una parte, que quedan muy sueltas, que algo te roza o te molesta, no lo dudes y descarta. Ten en cuenta que, durante el esfuerzo, es muy probable que cualquier molestia que sientas al probarlas se amplifique. No es necesario jugártela.
¿Qué talla elegir? Realmente, depende bastante del modelo. Lo importante es que tus pies estén cómodos. Ni demasiado apretados, ni demasiado sueltos. Piensa que siempre tiene que haber un poco de espacio por delante, tus dedos no pueden estar tocando el fondo de la zapatilla. Porque cuando corres, tus pies se dilatan algo, y puede haber un poco de movimiento. Si escoges una talla pequeña, puedes herir tus pies o tus uñas.
La importancia de la morfología en la elección de tus zapatillas para correr
Está claro que una persona que mide un metro noventa y pesa ochenta y cinco kilos no va a elegir necesariamente las mismas zapatillas de running que otra de metro sesenta y cincuenta kilos. Uno de los motivos es el nivel de amortiguación necesario. A mayor peso, más fuerza se ejerce durante la pisada, por lo que las personas más livianas pueden optar más fácilmente por modelos minimalistas.
Es importante destacar que la forma de correr importa mucho también para este tema. Un corredor experimentado tiene una pisada más eficiente y menos traumática, que en la práctica hace que no sea necesario un calzado con mucha amortiguación.
Elegir unas zapatillas de running en función de tu pisada
Ahora voy a emplear unos términos técnicos que suenan muy profesionales, pero que son necesarios para entender la importancia de la pisada en la elección de calzado para correr. Existe tres grandes grupos de corredores.
- Aproximadamente la mitad de las personas tiene una pisada neutra cuando corre. Es decir, que apoya los pies de manera plana respecto al suelo.
- Un cuarenta por ciento de los corredores tienen lo que se llama una pisada pronadora, lo que significa que pisan con la parte interior de la planta de los pies y la parte exterior del talón.
- Finalmente, una persona de cada diez corre con una pisada supinadora, apoyándose sobre el exterior del pie tanto en la parte delantera como en los talones.
¿Cómo saber qué tipo de pisada tienes? Es sencillo. Coge un par de zapatillas que hayas usado bastante para correr y mira donde está desgastada la suela. Te dará una buena idea. ¡Cuidado! No te vale usar zapatos de caminar. Tienen que ser zapatillas de running. No pisamos de la misma forma cuando andamos que cuando corremos.
Entonces, podrías pensar en elegir zapatillas que corrijan tu pronación o supinación. Pero no es la mejor solución. Si quieres evitar lesiones, lo mejor es trabajar tu pisada para acercarte a la pisada neutra.
La importancia del tipo de terreno
No vas a necesitar el mismo tipo de calzado si sales a correr en el asfalto que si puedes practicar tu deporte favorito sobre la tierra blanda de un parque. Pero eso lo decides tú solo hasta cierto punto. Si vives en una ciudad que tiene pocos espacios verdes, quizás no tengas más remedio que correr sobre las duras aceras.
Y claro, en función de la dureza de la superficie que vayas a pisar cuando salgas a correr, necesitarás calzado con más o menos amortiguación.
Elegir zapatillas de running en función de tu nivel y de la frecuencia de uso
Pongo esos dos criterios juntos porque normalmente van a la par. Los principiantes tienden a correr distancias más cortas, van más lento, y con menos frecuencia que los aficionados avanzados o los casi atletas que compiten en carreras.
Si vas a salir a correr para estar en forma, y no piensas en competir, puedes optar por un modelo de zapatillas de running relativamente sencillo. Los fabricantes tienen una categoría de entrenamiento que va muy bien para este tipo de uso. Lo importante, como siempre, es que te sientas cómodo/a en tus zapatillas.
Si piensas en hacer algunas competiciones, pero más por placer que por realmente tener un resultado y competir a fondo, entonces puedes elegir unas zapatillas para correr mixtas. Están a mitad de camino entre los modelos de entrenamiento y los de competición. Suelen ser algo más livianas, pero siguen manteniendo una buena amortiguación.
Para los que son profesionales, hay modelos mucho más caros y adaptados a la competición. Algunas zapatillas son muy minimalistas y livianas, mientras otras incorporan unas placas de carbono. Sinceramente, no tengo la experiencia suficiente para explicarte las ventajas de los diferentes modelos profesionales. Simplemente te los menciono para que el artículo sea completo. Me imagino que los pros del running no leerán este post.
Y con esas palabras termino esa explicación sobre como elegir tus zapatillas de running, especialmente cuando empiezas a correr. Espero que te haya sido útil.
Gracias por esta información. Me preguntaba, soy de pisada neutra y tengo los zapatos de Karhu, ¿me quedan bien?
Hola, gracias por comentar. Cada persona es diferente. La única forma de saber si unas zapatillas le convienen es probándolas.