Aunque una edad avanzada no tiene que implicar automáticamente la pérdida de apetito, lo cierto es que muchos ancianos reducen excesivamente su ingesta de comida. Vamos a ver unas opciones de batidos para esas personas mayores que no comen. Una alimentación deficiente en la tercera edad puede provocar muchas complicaciones, y aumentar el riesgo de enfermedades y percances. De allí que sea importante cuidar su alimentación.
Los casos de personas mayores desnutridas son frecuentes
Durante la preparación de este post, hemos podido comprobar con Nathalie Gallaztegui Suarez y María Torres, dos expertas y trabajadoras de la plataforma Qida, que los casos de ancianos con una alimentación insuficiente son frecuentes. Las causas de la pérdida de apetito pueden ser múltiples, como la soledad, el sedentarismo, la falta de ejercicio o incluso algunas enfermedades.
Las personas que cuidan a los mayores escuchan a menudo frases como “a mi edad, es normal tener poca hambre”, pero la realidad es que los ancianos necesitan una alimentación normal. Es más, requieren una mayor ingesta de proteínas que los adultos más jóvenes, y también necesitan más calcio. El objetivo es poder reforzar los músculos, que se van atrofiando con el paso de los años, y también los huesos, que se hacen más frágiles.
¿Cuáles son las consecuencias para las personas mayores que no comen suficiente?
El círculo vicioso de la desnutrición y el debilitamiento
Comer en cantidades insuficientes provoca un debilitamiento de la persona mayor. Al encontrarse con menos fuerza, pierde la motivación para hacer actividades. Eso puede reducir su vida social, y complicar la realización de pequeñas tareas diarias, aumentando su dependencia. Además, al sentirse más débil, es probable que la persona tenga menos ganas de comer, lo que acentúa el círculo vicioso.
El riesgo de caídas y accidentes
Menos comida implica menos energía, y un mayor riesgo de perder el equilibrio, caerse y hacerse daño. Además, como con la menor ingesta de comida se suele registrar una pérdida muscular, se pierde una parte de la protección natural contra las lesiones y los golpes. Unos músculos sanos nos protegen mucho más de lo que pensamos. Y si no se come suficiente calcio, el riesgo de fractura aumenta significativamente en caso de percance.
Infecciones
La desnutrición es un estado muy serio en el caso de las personas mayores, porque debilita el sistema inmune, y por lo tanto incrementa sensiblemente el riesgo de todos tipos de infecciones. Y eso viene agravado por el hecho de que muchos ancianos ya tienen enfermedades previas, que les debilitan aún más.
Úlceras de decúbito
Una nutrición deficiente también tiene como consecuencia que la piel pierda espesor, y que la circulación sea más deficiente. Si a eso sumamos el sedentarismo, el riesgo de úlceras por presión aumenta, y su curación se ralentiza.
¿Por qué los batidos son buena idea para las personas mayores que no comen?
- Es más fácil beber que comer, especialmente para aquellas personas que se encuentran debilitadas. El formato líquido es la primera de las ventajas de hacer tomar batidos a las personas mayores que no quieren comer.
- El otro gran beneficio de los batidos es que se pueden hacer fácilmente con muchos ingredientes. De esa forma, se puede preparar una mezcla para una dieta equilibrada.
- Normalmente, los batidos se hacen con una base de leche, un alimento fundamental por su alto contenido en calcio.
- Y, generalmente un batido tiene un sabor dulce, que lo hace más atractivo para cualquier persona. Pero, por el mismo motivo, no hay que abusar de este tipo de alimento.
La necesidad de una opinión médica
Antes de seguir con algunos ejemplos de batidos, me parece importante destacar un punto muy importante. La nutrición de las personas mayores es un tema principalmente médico. Los ancianos suelen tener enfermedades, intolerancias y alergias que restringen notablemente la lista de alimentos que pueden ingerir. Por eso, antes de plantear incluir batidos en la dieta de una persona mayor que no quiere comer, es necesario hablar con el médico para saber qué pueden incluir y qué no.
Ejemplos de batidos para personas mayores
Los tres ingredientes necesarios
- Una leche, preferiblemente tradicional, por su alto contenido en calcio. Puede incluso ser una leche enriquecida. Generalmente, la mejor opción es semidesnatada, para no ingerir un exceso de grasas. Pero también existen otras opciones como la leche de soja o de almendras, aunque suelen aportar menos calcio, e incluso menos proteínas.
- Una proteína, que generalmente se buscará en forma de nueces, almendras, cacahuetes o incluso semillas de soja.
- Una o varias frutas, para aportar fibras, vitaminas y azúcares. La lista de frutas que se pueden incluir en un batido es casi infinita, así que lo dejo a la imaginación del lector.
Por supuesto, se pueden añadir otros ingredientes para dar más sabor a la mezcla, siempre pensando en tener un resultado sano.
Un ejemplo: batido con almendra y plátano
La almendra es uno de los frutos secos más interesantes, porque tiene un alto contenido proteico y pocas grasas. El plátano, a su vez es una excelente fuente de potasio, es rico en vitaminas, minerales y antioxidantes, y es fuente de fibra.
Preparación. Dejar 20 gramos de almendras naturales en remojo durante toda la noche en leche (dos tazas). Al día siguiente, añadir un plátano mediano en su punto de maduración, una cucharita de canela, y licuar.
La mejor forma de actuar es probar diferentes opciones
Los batidos permiten muchas posibilidades, pero incluso buenas ideas no siempre quedan bien a la primera. Es importante hacer diferentes pruebas, para conseguir el sabor y la textura buscada. Una vez que se haya conseguido una lista variada de batidos que le gustan a la persona mayor, podrán ser incluidos en su dieta, de acuerdo con la opinión médica, para facilitar su alimentación. Así se puede ayudar a conseguir un envejecimiento activo y saludable y evitar caer en los peligros de la alimentación deficiente.