Cómo desarrollar una actitud positiva ante la vida

como tener una actitud positivaCon las muchas complicaciones del mundo actual, es fácil sentirse abrumado por el estrés y la negatividad. Sin embargo, adoptar una actitud positiva puede tener un impacto para mejorar tu bienestar emocional y mental. En este artículo, voy a explorar los beneficios de un punto de vista positivo y compartiré algunas recomendaciones para poder desarrollar esa forma de llevar la vida.

Los beneficios de una actitud positiva

Mejora la salud mental y emocional

Sin duda la principal ventaja que aporta gestionar las cosas desde una perspectiva positiva es que nos ayuda a manejar mejor el estrés y la ansiedad. Eso, a su vez, nos ayuda a cuidar la salud mental y emocional.

Cuando sucede algún incidente, grave o no, si te quedas con una actitud negativa tendrás menos opciones de encontrar una solución y es más probable que sientas los efectos nefastos del evento durante más tiempo. Si, en cambio, decides tomarte las cosas de manera más constructiva, resolverás antes el problema y te sentirás mejor.

Aumenta la autoestima y la confianza en uno mismo

Superar esos pensamientos negativos es un logro por sí mismo. Así que, centrándote en lo positivo, ayudas a reforzar tu autoconfianza, porque eres testigo de lo que eres capaz de conseguir. Eso, lógicamente, también ayuda a fortalecer tu autoestima.

Mejora las relaciones interpersonales

Si te fijas, habitualmente las actitudes negativas son más egocéntricas. Eso es porque nos sentimos víctimas de las situaciones. Sin embargo, con una actitud más positiva, te abres a los demás. Te ayuda a ser más amable, más compasivo. Y eso, sin duda, permite mejorar las relaciones interpersonales.

Aumenta la resiliencia emocional

Llevar un punto de vista positivo frente a la vida es un entrenamiento emocional. Cada vez que te das cuenta de que el fracaso puede ser una oportunidad de mejora y crecimiento, ayudas a fortalecer tu resiliencia emocional. Al siguiente evento negativo, tendrás más experiencia y mejores reflejos para no caer en la negatividad.

Cómo desarrollar una actitud positiva ante la vida

Como estoy seguro de que ya tienes claro los beneficios para tu vida de tomarte las cosas con una perspectiva más positiva, voy a pasar a lo que realmente nos cuesta a todos al principio. Me refiero, por supuesto, a cómo desarrollar esa actitud positiva de la que te estoy hablando.

Pon el foco en lo positivo

Como ves tu vida es una cuestión de perspectiva. Quizás no estés mirando en la dirección correcta. Así que, en lugar de enfocarte en lo que está mal en tu vida, procura focalizarte en lo que está bien. Al principio quizás pienses que esos aspectos positivos no son nada respecto a las cosas malas. Pero si te acostumbras a cambiar el foco, aprenderás a encontrar el lado positivo en muchas situaciones.

Agradece lo bueno de tu vida

¿Y si dejas de dar por hechas las cosas buenas de tu vida? A menudo consideramos que lo bueno es lo normal y lo malo una injusticia. Si tomas el tiempo cada día de practicar la gratitud, te ayudará a reflexionar sobre las cosas positivas en tu vida y a sentirte agradecido por ellas. Es muy probable que eso te ayude a enfocarte en lo positivo, y apreciar lo que tienes.

Aprende a reírte de ti mismo

Una persona que se toma todas las cosas muy en serio tiene más probabilidad de caer en una visión dramática de las cosas, especialmente si se toma a sí misma muy en serio. No lo hagas. Aprende a reírte de tus propios errores, y de ti mismo en general. El humor es una gran herramienta para relativizar las cosas, y puede ser una cura de humildad, además de optimismo.

Procura ver el fracaso como una oportunidad de mejora

Cuando algo sale mal, siempre tienes al menos dos formas de tomarte las cosas. Una es darte por vencido, pensar que no vales para ello, y que no hay solución. La otra es aprovechar la oportunidad, verla como una lección, y procurar aprender para hacer las cosas mejor la próxima vez.

Ten compasión contigo mismo

Antes comenté la importancia de saber reírte de ti mismo y de tus errores. Pero el humor no tiene porque ser una crítica. No seas tan duro contigo mismo. Al contrario, procura ser amable. Es clave que aprendas a perdonarte y que te trates con compasión. Una cosa es tener un alto nivel de exigencia, que es una gran herramienta para lograr objetivo, y otra muy diferente es maltratarte cuando te equivocas o fracasas en algo concreto.

Prueba a ser más optimista

Está claro que tener una actitud positiva ante la vida tiene mucho que ver con la perspectiva optimista. ¿Y qué significa intentar ver las cosas desde un punto de vista optimista? Simplemente que deberías enfocarte en las posibilidades y oportunidades, en lugar de las amenazas y obstáculos. Es una idea similar a la de poner el foco en lo positivo, pero no mirando tu situación actual, sino las posibilidades que tienes enfrente.

Demasiadas personas viven con estrés y ansiedad porque siempre piensan en lo malo que puede ocurrir. Esos pensamientos generan miedos y una tensión constante. Es útil pensar en lo que podría salir mal, porque te ayuda a tomar decisiones prudentes. Pero ser previsor y ser pesimista son dos cosas muy distintas. Tomar en cuenta una posibilidad negativa no significa anticiparla emocionalmente tomando como casi seguro que vaya a suceder.

Pon en jaque tus pensamientos negativos

Cuando te encuentres preocupado, para un momento. Reflexiona y escucha lo que te están diciendo tus pensamientos. En muchas ocasiones, te darás cuenta de que estás pensando de manera muy negativa. Será la oportunidad perfecta para desafiar esos pensamientos, forzándote a contrarrestarlos con evidencia de elementos positivos.

No es fácil, porque muchas personas tienen una tendencia a seguir sus emociones negativas, y a escucharlas como si tuvieran razón. Aceptan esa sensación como la consecuencia lógica de un razonamiento objetivo. Pero, en muchos casos sucede lo contrario. La emoción es la que condiciona tu mente a emitir esas ideas negativas, que a su vez refuerzan los sentimientos negativos. Pero, si te das cuenta, y fuerzas tu conciencia a tomar en cuenta los elementos positivos, podrás parar el ciclo de negatividad.

Ejemplos de cómo desarrollar una actitud positiva en la vida cotidiana

Hasta ahora hemos hablado de manera un poco general, así que vendrá mejor analizar casos concretos de cómo puedes potenciar tu actitud positiva en tu vida de cada día.

En tus relaciones con los demás

Todos los días puedes empezar a practicar una actitud positiva cuando interactúes con otras personas. Es habitual que nos centremos en los defectos de los demás, pero ahora que quieres pensar de una manera diferente, ponte a buscar las cosas positivas en las personas que te rodean. Si a eso le sumas una actitud más agradecida hacia los demás, empezarás a ver los frutos de tu nueva perspectiva.

Ser más positivo en el trabajo

Procura no pensar tanto tiempo en las tareas que no te gustan o en esos compañeros que no te caen muy bien. En su lugar, procura poner el foco en las cosas positivas de tu trabajo. Me refiero a las tareas que te gustan, o a los logros que has conseguido, por ejemplo. Además, el trabajo es el lugar perfecto para empezar a ver los desafíos como los que son: oportunidades para aprender y crecer.

En las situaciones de cambio e incertidumbre

Aquí tienes una gran forma de poner en práctica los consejos que te he compartido. Cuando estés en una situación en la que hay mucha incertidumbre, o un cambio importante en tu vida, tienes una elección. Esta vez, en lugar de preocuparte por lo que podría salir mal, enfócate en las oportunidades y posibilidades que ofrece la situación. Aprende a confiar en ti mismo y en tu capacidad para adaptarte a los cambios.

Cuando estés con mucho estrés

Nuevamente, puedes aprovechar la situación, para darte cuenta de lo que estás pasando, y tomártelo como una oportunidad para crecer y aprender. Además de entrenar tu mente para pensar en positivo, puedes usar herramientas para reducir el nivel de estrés. Para ello, puedes practicar la meditación, el yoga o la respiración profunda.

Conclusión

Los beneficios de desarrollar una actitud positiva ante la vida son enormes. Cuanto antes empieces a cambiar tu mentalidad, antes mejorarás tu calidad de vida. En mi opinión, tu mayor herramienta es tomar conciencia de tus pensamientos, para relativizar las cosas y obligarte a reconocer los aspectos positivos que están allí. Y, si te cuesta cambiar de actitud, recuerda que puedes contar con la ayuda de un psicólogo o de un coach. Te podrán dar más pautas para mejorar tu actitud y tus perspectivas.

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