Muchas personas que llegan a los 60 años experimentan grandes cambios en sus vidas. Suele ser la década de la jubilación, pero también de algunas modificaciones de comportamientos y de costumbres. Es una época que puede ser un reto al nivel físico y mental. Para las personas que se preguntan como perder peso después de los 60, he preparado un artículo con consejos adaptados. Empezaré por explicar por qué es especialmente importante cuidar el peso a medida que van pasando los años, antes de dar recomendaciones para mantener la línea o adelgazar.
Con la edad, es más difícil perder peso, por varios motivos
A medida que nos vamos haciendo mayores, nuestro metabolismo basal tiende a reducirse. Ten en cuenta que la masa muscular baja con los años, entre otras cosas. Eso significa que gastamos menos energía cuando estamos inactivos. Eso tiene un gran impacto sobre la silueta, porque de base necesitamos menos calorías, y si seguimos tomando las mismas que antes, el exceso se acumula en forma de grasa.
Además, con la edad la mayoría de las personas se vuelven menos activas físicamente. Hay varios motivos para ello. Se producen cambios en la vida, como pasar de trabajar a estar jubilado. También los achaques de salud, que aumentan con los años, pueden limitar las actividades físicas. Eso sin contar con que es más fácil cansarse que cuando uno estaba más joven.
También suele haber más tiempo para el ocio, lo que puede implicar salir más a restaurantes o preparar comidas copiosas. Eso incrementa la aportación de calorías.
Finalmente, no se puede menospreciar el efecto que tiene la menopausia en muchas mujeres. Lo que sucede es que disminuye el nivel de estrógenos, una hormona que ayuda a metabolizar las grasas y a reducir los niveles de colesterol en sangre. Esos cambios aumentan el riesgo de aumentar de peso.
Privarse no es la solución para perder peso después de los 60
Hay una gran diferencia entre comer platos equilibrados en cantidades adecuadas y privarse. Las dietas muy restrictivas son una mala idea a cualquier edad, porque pueden provocar carencias en la aportación de nutrientes. Pero todavía son más peligrosas para las personas de más edad, que necesitan calcio y otros elementos nutricionales.
Así que no caigas en la tentación de seguir una dieta milagrosa para adelgazar rápido. Simplemente sigue algunas recomendaciones de nutrición y controla las cantidades que comes para adecuarlas a tu gasto energético.
Reducir el azúcar
Los azúcares son nutrientes que favorecen el almacenamiento de grasas en el organismo, por lo que reducir su ingesta ayuda a no engordar y a adelgazar. Concretamente, implica comer menos alimentos con azúcar. Y eso significa mirar con cuidado las etiquetas nutricionales de los productos, porque hay dulce prácticamente en todas partes.
Además, es importante incrementar el consumo de verduras, y procurar sustituir algunos carbohidratos como los cereales por sus versiones integrales. Aumentar el consumo de proteínas también es buena idea, tanto de origen animal como vegetal. Para las proteínas animales hay que dar prioridad a las que tienen menos grasas, como el pescado, por ejemplo. Y también comer frutas con menos azúcar.
Comer lácteos, pero con cabeza
Para evitar el riesgo de osteoporosis, es muy recomendable consumir más productos lácteos. Pero no de cualquier forma. Concretamente, hay que evitar los lácteos con azúcar o con grasas, para optar por versiones más ligeras, como desnatadas o 0%. Hablamos de leche, yogures, y otros productos lácteos en general.
Perder peso después de los 60 implica beber lo suficiente
A medida que van pasando los años, las personas sienten menos necesidad de beber. Sin embargo, tomar agua en cantidad suficiente sigue siendo imprescindible para tener buena salud. Ya sabes que cada día tienes que tomar aproximadamente 2 litros de agua, de los cuáles 50cl suelen proceder de los alimentos.
Lo mejor es beber agua, pero también puedes contar con infusiones u otras bebidas. Lo importante es que no lleven mucho azúcar, ni alcohol, ni tengan mucha grasa. El agua es fundamental para eliminar toxinas y para que tu organismo funcione correctamente. Si no bebes lo suficiente, es más probable que engordes.
Dormir bien sigue siendo fundamental
Las personas de más edad notan como necesitan dormir menos que años atrás. Eso es en parte normal, pero no significa que haya que renunciar al mínimo diario de horas de sueño, que sigue siendo siete horas.
No solo consumes calorías cuando duermes, sino que la falta de sueño suele llevar a querer comer más, para procurar compensar la falta de energía. Cuando duermes bien, evitas esas tentaciones.
Otro consejo importante para dormir mejor es acostarse todos los días a la misma hora, porque entonces es más fácil conciliar el sueño. Y esa hora debería ser antes de las 12 de la noche.
Hacer deporte de manera adaptada para mantener la forma
Está claro que los años no pasan en balde, y que no puedes hacer deporte con la misma intensidad a los 70 que a los 20 años. Pero sigue siendo necesario realizar los treinta minutos de actividad moderada cinco veces a la semana.
Encuentra unos ejercicios adecuados para tu edad, como la caminata rápida, el pilates, la natación, el yoga, y otras muchas más. Practicar deporte no solo te ayuda a quemar más calorías, también te ayuda a tonificar el cuerpo.
Mucha paciencia y prudencia para perder peso después de los 60
Lo dije desde el principio. Perder peso se hace cada vez más complicado a medida que avanzamos en edad. La consecuencia directa es que los resultados tardan en concretarse. Por eso, debes tener mucha paciencia, y confiar en la estrategia que estás usando para adelgazar. Y si tienes dificultades, no dudes en hablar con tu médico de confianza o con un nutricionista.
Lo importante es estar sano, y con un peso adecuado. Es decir, evitar el sobrepeso, y, con más motivo, la obesidad. Tampoco tendría sentido obsesionarse por tener una silueta perfecta, y tomar medidas drásticas para conseguirlo. Eso es cierto a cualquier edad, de hecho.
Así que, como expliqué antes, ten cuidado en no privarte, y tampoco hagas actividades demasiado exigentes, puesto que, con la edad, las lesiones son más probables y también tardan más en curarse. Pero tienes que moverte, y comer de forma equilibrada y en cantidades adecuadas.